El verano de 2019 pasará a la historia de Rusia como el período en que las autoridades estatales decidieron prohibir a los funcionarios nacionales comprar algunos productos alimenticios extranjeros.
Este es un decreto que implica la introducción de una serie de enmiendas a la lista de disposiciones que los funcionarios del gobierno pueden comprar como parte de la satisfacción de las necesidades municipales (un documento fechado el 25 de mayo de 2019 con el número de serie 660).
Es de destacar que el documento entró en vigor hoy. Y a partir de ese día, los funcionarios rusos ya no podrán realizar compras públicas de productos extranjeros como vinos espumosos, así como licores y bebidas alcohólicas de frutas.
Esta medida está dirigida principalmente a popularizar los productos vitivinícolas nacionales como parte de las sanciones contra muchos productos alimenticios extranjeros.
La sustitución de importaciones también sugiere que, de acuerdo con la nueva resolución, los funcionarios ahora están obligados a realizar compras gubernamentales de carne nacional (cerdo, ternera, carne de res, carne de aves de corral), pescado y productos pesqueros (caviar, mariscos, etc.), productos lácteos ( queso, leche, leche en polvo, requesón, mantequilla, etc.), así como sal y azúcar.